Freidoras sin aceite

Vida sana, dieta equilibrada y cocinar sin aceite… Y es que aunque nos encantan los fritos, no son muy saludables por eso la tecnología ha creado las freidoras sin aceite, capaces de crear una textura muy parecida con una cantidad ínfima de aceite. Saludable y rico. La mejor selección de freidoras sin aceite.

Guía para comprar la mejor freidora sin aceite

En esta guia aprenderás todo lo que necesitas saber para comprar una freidora sin aceite.

¿Qué es una freidora sin aceite?

¿Una freidora que fríe sin freír? ¿Qué prodigio es ese? Aclaremos desde ya unos conceptos básicos.

Verdaderamente no es una freidora como las que estás habituados a conocer, con su cubeta llena de aceite reciclado y su rejilla chorreante. La realidad es que estos aparatos son una clase de mini hornos capaces de dorar los comestibles para proporcionarles el aspecto de fritos.

Porque la realidad es que la fritura es una técnica culinaria complicado de sustituir, si no irrealizable.

Como sabes, freír es cocinar un alimento sumergido en una grasa a alta temperatura, lo que le proporciona a la parte externa ese satisfactorio tono doradito que nos se ve tan interesante. Nuestra freidora sin aceite es con la capacidad de reproducir esa fachada súper apetecible. No es poca cosa, todos entendemos hasta qué punto se “come por los ojos”, valorando el alimento por su apariencia.

Hay que admitir que nuestra “fritura” sin aceite no posee precisamente el mismo gusto que la original, pero a cambio capacidad muchísimo más el del alimento mencionado. Con la virtud de que descarta toda la grasa. Si pones todo en una balanza vas a ver que compensa, y bastante, tener una freidora sin aceite para el todo el tiempo.

Freír sin aceite… ¿cómo lo realiza?

En concordancia, ahí va el truco: con aire. Aunque hay variedades entre unos modelos y otros, la tecnología usada viene siendo más o menos la misma. Emiten aire a alta temperatura que se distribuye por todo el receptáculo, un sistema parecido al de los hornos con ventiladores. Un óptimo electrónico va a mantener el aire circulando de manera recurrente y ligera.

Los comestibles se cocinan uniformemente y –teóricamente- no hay necesidad de voltearlos para que se hagan por todas partes. En la costumbre, nuestra sugerencia es que le des una vuelta a medio cocinado, que de esta forma te aseguras de que el calor se reparte por toda la comida. Hay algunas freidoras que ya remueven la comida solas, pero si la tuya no lo realiza, ponte una alarma cada 10/15 minutos y hazlo a mano.

Mira entre otras cosas como se enlista la comida más habitual, donde seguramente estás pensando: las patatas fritas.

Como hemos recordado, freír, en su sentido clásico, es sumergir un alimento en una grasa ardiente, en tanto que lo que hacen estas freidoras es cocinar con aire ardiente un alimento que tú antes has impregnado con algo de aceite, de forma muy superficial. De esta forma se consigue el característico aspecto dorado sin obligación de ensopar el alimento en la grasa.

O sea, que sí puedes utilizar algo de aceite, en tu mano está cuánto deseas echar o si deseas prescindir de él completamente, pero eso achicará muy el color oro y la textura crocante. Con una cucharada chica es bastante para la mayor parte de los platos. Otra alternativa es comprarse un spray y rociar la área del alimento. No debemos decir lo que ahorras en grasas. En tu mano está limitar en más del 80% el aceite que usas. No está mal, ¿eh?

¿Por qué te atrae una freidora sin aceite?

Hagamos un comprendio de las virtudes para que las poseas visibles al primer golpe de vista:

Porque deseas comer sano

Tu salud te atrae. Y para cuidarte lo primero es controlar que tu nutrición sea lo verdaderamente saludable viable. Las frituras están permitidas cuando vas a la fiesta de tu pueblo y te compras una docena de churros, oséa, de forma esporádica, pero vivir de fritos es un atentado contra tu salud, y lo sabes.

Más argumentos vas a tener si, además, estás a dieta o eres de los que tienen que vigilar el colesterol. Ahí sí que por el momento no tienes nada que suponer.

Porque no renuncias a -casi- nada

Con una freidora sin aceite los comestibles tienen el mismo aspecto apetecible, intensifican su gusto y evitan todos los perjuicios de la fritada.

Porque no deseas que tu casa huela a fritura

Ya que es otro aspecto a tomar en cuenta, que se acabaron los olores. Ese aroma peculiar a fritanga que puede ser apetecible cuando vas por la calle en el momento de comer… pero tan repugnante cuando lo tienes metido en el hogar. Fin. Para siempre. Estos aparatos no dejan rastro odorífero en el ámbito o si lo dejan, se va con la primera corriente de aire por medio de los filtros que llevan incorporados.

Porque es más limpia que una freidora tradicional

Si conoces las otras, vas a saber que en el mejor de las situaciones, y esmerándote bastante en la limpieza, terminan siendo un pringue de aceite de todas formas. Este electrodoméstico es simple de limpiar. La mayor parte de los aparatos son desmontables y también tienen piezas que van directas al lavavajillas.

Enserio te prometemos que se puede almacenar limpio luego de cada uso, cosa que era misión irrealizable con las freidoras de toda la vida. Luego de fregarlo todo todavía seguían mostrándose salpicaduras… ¿es o no es verdad?

Porque ahorras energía

Por supuesto, va a gastar menos que un horno clásico. Estudia tu modelo, a más grande eficacia energética, más ahorro garantizado.

Porque tienes poco tiempo

…y el programador llegó para salvarte la vida. ¡Enhorabuena! Ya estás conociendo todas las opciones. Si tu modelo tiene programador, cuando aprendas a vigilar los tiempos y las medidas, tu vida va a cambiar radicalmente. ¡Y no tienes idea cuánto!

¿Qué puedes cocinar con tu novedosa freidora sin aceite?

Como esto, pero en sano

Vamos a echar una mirada ágil a las opciones, para que se te lleve a cabo la boca agua mientras lees. ¿Qué tal unas costillas adobadas en 25 minutos? ¿Y un pescado frito en 20? ¿Un arroz con calamares? ¿Empanadillas de bonito? ¿Albóndigas en salsa? ¿Calabacines rellenos, en su punto de horneado? Y desde luego las reinas de la fiesta: las patatas fritas.

Y ojo, que no llegamos a los dulces. Unos donuts caseros, churros para la merienda, flan, manzanas asadas, todos los bizcochos imaginables. Con esto te haces un concepto, ¿no?

Cosas a tomar en cuenta para seleccionar bien

Todos los modelos tienen alguna característica o agregan plus atrayentes, pero hay varias cosas simples que tienes que tomar en cuenta para estar seguro una aceptable compra. Piensa bien tu compra para no abonar por lo cual no necesitas y no quedarte corto por no agregar funciones que después vas a echar de menos. Atención a estos puntos:

Versatilidad

Mira bien la lista de funcionalidades. Debe detallar que logre freír, tostar, asar, hornear gratinar.

Potencia

Ojo con este punto. A más capacidad, por lo general, más cargo en la factura de la electricidad. La mayor parte de los modelos acostumbran fluctuar entre 1.100 y 1.650W.

Sin embargo hay modelos de mucha capacidad con alta eficacia energética. Esto significa que, aunque gastan más, requieren menos tiempo para cocinar, por eso la cuenta se equilibra.

Capacidad

Básicamente todas las freidoras sin aceite tienen una cubeta primordial y una cesta o rejilla al estilo de las freidoras habituales. De ese modo, el poco aceite que puede sobrar se escurre hacia el compartimento grande, más simple de limpiar.

Cuando estamos hablando de tamaños, lo habitual es referirse a la cubeta grande, pero si usas la rejilla piensa que esta aptitud se va a achicar un poco. Entre 1,5 y 3 litros es la medida recurrente, aunque para familias varias hay modelos de hasta 7 litros. Lo lógico es ver el volumen que admite, pero hay modelos que te dan la referencia en gramos: 600/800 gramos de aptitud podría considerarse apto para dos personas.

Calcula según tus pretenciones. No te compres algo colosal si después no vas a explotar sus opciones, acabará siendo un armatroste en una esquina. Y si te quedas corto además acabarás por no utilizarlo. Es considerable que en este punto des en el clavo.

Facilidad de uso

Que sea simple de desarmar es primordial, porque de esta forma te va a proporcionar menos pereza desarmarla para limpiarla bien. La cubeta debe separarse en unos cuantos pasos para ser confortable. Además te conviene ver si las piezas de tu modelo son aptas para meter en el lavavajillas. Más tranquilidad para mantenerla limpia.

Básicamente todas las freidoras sin aceite tienen un desempeño muy deducible, asi sea con pantalla digital o con mecanismos de rosca y botones. Y muchas integran preprogramaciones para que solo poseas que ofrecerle a un enlace.

Dimensiones totales

No sobra que hagas el cálculo de cuánto te va a ocupar en la cocina, tanto si vas a tenerla sobre la encimera o guardarla en un armario, para que compruebes si te cabe en el espacio utilizable. Las hay muy compactas, simples de guardar en huecos chicos, pero otras son muy enormes. No te lleves un susto cuando llegue a casa, en plan ¿y en este momento dónde guardo esto? No serías el primero en despistarse con esto.

Otras cosillas que te tienen la posibilidad de interesar

Hay modelos con la cubierta transparente que te aceptan ver cómo avanza la cocción de los comestibles, lo que no es infaltante, pero nos encanta. Otros tienen doble bandeja, oséa, tienen dentro la oportunidad de cocinar dos comestibles a la vez y por separado. Doble ahorro de tiempo y energía.

Algunas marcas obsequian un recetario y hasta te proponen la oportunidad de bajar una aplicación para estar al día de novedosas opciones. Esto es atrayente porque los tiempos de cocción, que tienen la posibilidad de cambiar de un modelo a otro gracias a las diferentes propiedades (potencia, etc) van a estar ajustados al modelo que te has comprado.

En relación a la seguridad, es atrayente que te asegures de que tiene alguna clase de custodia contra el sobrecalientamiento, como el apagado automático entre otras cosas, y en cualquier situación que los agarres siempre se contengan fríos para manejarla con tranquilidad y sin peligros en todo instante.

Precio

Lo hemos puesto en el final, no porque no sea considerable, sino porque va a quedar definido mientras vayas decidiendo qué tamaño necesitas, qué funciones, etc. Ten presente que este electrodoméstico es una inversión que te va a ofrecer muchas alegrías y que está designado a permanecer, por eso a lo mejor en esta situación te convenga seleccionar un óptimo modelo aunque resulte algo más caro. Eso si tu bolsillo te lo facilita, claro.

Últimos consejos

La realidad es que una freidora sin aceite es un electrodoméstico de esos que cuando entran por la puerta de casa se hacen indispensable. Es necesario un tiempo de amoldación recíproca, eso es verdad, evaluar recetas, cambiar tiempos… y más que nada familiarizarte con un nuevo criterio de cocina. Pero una vez hecho eso, cuando ya domines las opciones de tu freidora sin aceite, le vas a sacar un partido que no te puedes imaginar.

Vas a gozar de unas alitas de pollo crocantes, de tempuras sabrosísimas y saborearás las patatas fritas sin remordimientos, doradas por fuera y agradables por dentro, en su punto exacto.

Y un último consejo: como en la situacion de otros electrodomésticos o robots conocidos, hay miles de fanáticos contentos con su freidora sin aceite que recopilan, inventan y distribuyen recetas de cocina. Además de que te coloques creativo en el momento de ponerte a cocinar, no sobra que te inspires en la vivencia de otros para crear platos llenos de gusto. Como todo, transporta un tiempo cogerle el punto, pero cuando lo haces vas a saber que has cambiado para toda la vida tu forma de cocinar.